Si alguien te pregunta qué es lo más sorprendente del Estado Islámico ¿qué dirías?
Unos dirían que sus niveles de violencia y destrucción. Una máquina de matar y oprimir de la que las mujeres son la principal víctima. La barbarie que prosigue mientras el resto miramos.
Otros, un poco más refinados, afirmarían que Estado Islámico es una máquina propagandística. Y una muy efectiva, por cierto, con enorme capacidad de reclutamiento y diseminación de su mensaje, en el Levante y en Occidente.
Habrá quien desearía ir hasta el fondo del problema y sugerir que el Estado Islámico es una realidad socio-política, un síntoma de las deficiencias estructurales de ese espacio social que es la frontera entre Síria e Iraq. Proseguirían comentando su extenso entramado de servicios sociales e instituciones, todo legitimado a través del proselitismo religioso, con pura vocación de socializar y perecer en el territorio.
Pero pocos, muy pocos, optarían por destacar su micro-política. Sí, sus decisiones administrativas y regulaciones. Esas decisiones políticas que no sólo afectan al devenir de la guerra, si no que estructuran y establecen límites al día a día. «The normality of civil war«, diría la brillante socióloga política Theresa Koloma Beck. Las regulaciones administrativas del Estado Islámico son muchas y muy variadas. Desde imponer un currículum educativo determinado, un código de vestimenta para las mujeres, o unas limitaciones a la libre circulación de personas, hasta regular los precios que se pagan por las viviendas o ofrecer puestos de trabajo para su extensa red de instituciones.
El Estado Islámico es como una cebolla y todos estos puntos forman sus múltiples capas. Durante estos últimos años, los que seguimos el día a día del Estado Islámico nos hemos ido topando con decisiones, acciones y regulaciones de todo tipo. Personalmente, muchas me han parecido de una brutalidad y violencia sin igual. Otras, me han parecido coherentes con sus objetivos y tácticas, y hasta algunas inteligentes al conseguir legitimar su discurso y afianzar su control sobre la población y el territorio. No obstante, el Estado Islámico también es fuente de decisiones aparentemente ridículas y delirantes.
Me gustaría compartir mi asombro con vosotros. ¡Ahí va mi TOP 1O!
10. Fatwa sobre la producción y ventas de marcas de imitación
¿Cuándo se puede fabricar productos de imitación y venderlos en el Estado Islámico? A pesar de justificar la prohibición como regla general ya que el fraude y el engaño no son permitidos por la ley de Dios, hay algunas pequeñas excepciones si el vendedor quiere proseguir con su actividad:
1) Debe escribir el nombre de la marca con la misma letra y tamaño que en un producto original para suavizar el daño que se inflige al comprador al adquirir una imitación.
2) El precio de la imitación tiene que ser inferior al del producto original.
9. Se notifica que está prohibido el uso de GPSs y de dispositivos Apple
Para proteger a los soldados del califato y aquellos que viven bajo su mandato y impedir que los Cruzados penetren en el territorio, se han destinado técnicos a cada una de las provincias para desactivar las funciones GPS de todo dispositivo electrónico.
Peor suerte corren los dispositivos Apple, que directamente están prohibidos bajo el mandato del Estado Islámico. No hay ninguna mención a Android, por algo será.
8. El Estado Islámico ha desarrollado su propio sistema sanitario y hospitalario. Es, pues, una muestra mas de la importancia que se otorga al desarrollo de instituciones y la provisión de servicios. La sorpresa llega cuando vemos el logo y lo comparamos.
Aquí tenéis una captura de pantalla del video promocional del «Islamic State Health System».
Y aquí teneis el logo del National Health Service (NHS) británico. Shame on you Cameron.
7. Se notifica la apertura de una fábrica de órganos artificiales (sintéticos) en Wilayat Ninewa
Se notificará a la fabrica los pedidos previo registro en el Diwan al-Siha (Departamento de Sanidad). Se advierte, además, que no se recurra a Turquía para la fabricación de órganos sintéticos en caso de necesitarlos.
Producción local ante todo.
6. Se prohibe la cría de palomas en los tejados de las casas en Wilayat al-Furat
Todos aquellos vecinos que críen y adiestren palomas en sus tejados, deben dejar de hacerlo. No cumplir con la ordenanza repercutirá en una multa, flagelaciones y pena de prisión. Al-Hisbah (policía moral) debe ser informada de aquellos que siguen con este gran acto criminal que perjudica a los vecinos .
5. Una nueva guía del Estado Islámico aconseja a todo jihadista occidental preparar un kit de supervivencia en el que se debe incluir un condón
El kit debe contener, entre otras cosas: un mechero, una vela, agujas, hilo de pescar, un botiquín, un bisturí, y también un condón. Este último es de gran ayuda para…almacenar hasta un litro de agua según los redactores de la guía.
4. Regulaciones sobre la pesca que afecta a Wilayat Deir Ezzor
Como resultado de la falta de control sobre la abundancia de peces, la ambición y codicia de los pescadores y el uso de técnicas de pesca ilegales que pueden dañar la salud del resto, el Estado Islámico ha decidido lo siguiente:
1) El uso de corriente eléctrica para pescar peces esta prohibido debido a que lleva al exterminio a muchas criaturas marinas y desfigura a los peces de rio más pequeños.
2) No se podrá pescar utilizando…explosivos o dinamita.
3) No se podrá pescar usando veneno u otras substancias químicas.
4) No se podrá pescar en época de reproducción.
Y EL PODIO ES PARA…
3. El Estado Islámico rehabilita e inaugura un hotel de lujo en Mosul
Cuenta con pistas de tenis y piscina, pero no se podrá disfrutar del salón de bailes y tampoco del bar. A los huéspedes que no respeten las normas y el código de vestimenta se les amputará las extremidades.
La noche vale 65 libras esterlinas, por si alguien se lo estaba preguntando.
2. A los jihadistas del Estado Islámico les gusta la Nutella. FACT.
Varios militantes del IS compartieron a través de Twitter fotos con tarros llenos de Nutella, afirmando su amor por tan delicioso producto. ¿Un embargo sobre la Nutella supondría un golpe mortal a la moral de los combatientes del Estado Islámico?
1. Fatwa sobre el uso de futbolines en el Estado Islámico
Se informa que se podrá jugar al futbolín bajo las siguientes condiciones:
1) No se debe apostar.
2) No puede acarrear blasfemias, insultos u otro tipo de resentimiento. Vamos, que si encajas un gol de portería a portería, lo tienes que asumir con dignidad.
3) Jugar al futbolín u otros juegos de mesa no pueden suponer una distracción de las obligaciones de todo buen musulmán ante Dios.
4) De acuerdo a las leyes del Islam, no puede existir ninguna representación humana (ya sea en forma de retrato o de estatua). Por consiguiente, los figurines del futbolín deben ser decapitados para no presentar forma humana, no inflingiendo la fuerte prohibición que existe por lo que a representaciones humanas se refiere.
El Estado Islámico también es, entre muchas otras cosas, un producto mediático consumido por millones de espectadores. Y sabiéndose hábil en el espacio mediático, sus miembros no dudan en la diseminación de cualquier decisión de este calibre, a veces para hacer llegar la información a todo el territorio, otras veces para generar en nosotros, la audiencia, la confusión o el asombro.
La obstinación del Estado Islámico por regular los límites de cualquier situación, actividad o espacio y sus niveles de radicalidad, llevan a la organización a tomar decisiones tan delirantes como las arriba mencionadas. Su proyecto es la socialización totalitaria: la creación de un nuevo espacio social en el que cada actividad, cada movimiento, cada espacio, recuerde a sus habitantes los principios ideológicos inquebrantables que rigen el sistema.
Este es uno de los muchos engranajes del Estado Islámico. Es, sin duda, uno de los más perversos: el control sobre lo cotidiano.